Piel maravillosa con el tratamiento Skinboosters: mi experiencia

Confieso que desde hace unos meses mi cutis estaba realmente mal. Tengo la piel sensible y además mixta grasa, así que suelo tener problemas más o menos recurrentes, pero de un tiempo para acá, mis problemas se habían agravado. Tenía la piel muy deshidratada, apagada y con muchos granitos El mes pasado acudimos a una presentación de los nuevos tratamientos de Clínica Londres, donde nos presentaron los Skinboosters, así que pensé que sería apto para mejorar la calidad de mi piel. ¡Tenía que probarlo!

En Clínica Londres,  Ana Sánchez Hidalgo, Médico Especialista en Medicina Estética, me hizo un diagnóstico muy completo de mi rostro. Básicamente mi piel sufría una pérdida de colágeno importante sumado a un problema de brotes de acné en la zona de la mandíbula. Tendría que seguir una serie de cuidados en casa. Me sugirió dos sesiones de mesoterapia con Skinboosters espacidas en un mes para mejorar la calidad de mi piel.  

¿Qué son los Skinboosters? Es un tratamiento de microinyecciones hidratantes con un gel suave de ácido hialurónico. Es una nueva forma de "alimentar" la piel desde el interior.

¿Qué se consigue? Aumentar los niveles de hidratación desde el interior de la piel para mejorar la superficie cutánea y para obtener un brillo saludable, además se incrementa la firmeza y elasticidad de la piel.

El ácido hialurónico se encuentra de manera natural en nuestro organismo, es el responsable de mantener la hidratación de la piel. Con el envejecimiento, la calidad del ácido hialurónico dosminuye, así que los Skinboosters son una gran opción para hidratar naturalmente desde el interior.

¿Quiénes pueden utilizar Skinboosters? Hombres y mujeres con cualquier tipo de piel, personas jóvenes o maduras. Ideal para quienes desean mejorar la estructura cutánea, en casos de cicatrices de acné o foto envejecimiento.

Mi experiencia

Antes del tratamiento me aplicaron una crema anestésica en el rostro, muy parecida al Emla, tengo una piel muy reactiva, así que mi piel estaba un poco "enojada" con la crema. La doctora procedió a inyectar en zonas clave en el rostro, entrecejo, mandíbula, en el pliegue nasolabial. El tratamiento tuvo una duración de unos 10-15 minutos (sin contar una media hora desde la aplicación de la crema anestésica). No sentí ninguna molestia, ningún de dolor.

Los resultados son inmediatos. La piel estaba radiante y mucho más firme, pero como mi piel es muy sensible, me salieron rojeces y un pequeño hematoma (es algo normal).

Cuidados posteriores: No debemos usar maquillaje el día del tratamiento, ni realizar deporte excesivo, prohibido ir a la piscina. Los hematomas y las rojeces desaparecen en unos días. Debemos evitar el sol por un par de semanas y evitar los rayos UVA. 

Los días posteriores al tratamiento, tenía la cara con rojeces muy pronunciadas, como si me hubieran echado ácido en la cara. La piel se empezó a descamar al segundo día, en las áreas tratadas.

Mi salvación fueron estos dos productos: Eucerin Aquaphor, una pomada reparadora que acelera el proceso de regeneración cutánea y el tratamiento de choque de ácido hialurónico de Montibello, recomendado para complementar las inyecciones de ácido hialurónico. Ya os he hablado de ellas en este post. En ese post también hablo de la nutricosmética Bodhi, yo estoy utilizando Bodhi +40 para incrementar el colágeno y potenciar el tratamiento SkinBoosters.   

Después de una semana mi piel mejoró considerablemente, tengo el rostro luminoso, la piel más jugosa, suave  y mucho más firme. Han pasado ya 12 días y mi piel se ve mejor cada día, el acné  y las cicatrices han disminudo, las líneas de expresión más difuminadas. Mi próxima sesión es dentro de un mes, así que mi piel seguirá mejorando.

Conclusión: Estoy encantada con los resultados, es un tratamiento que recomiendo ampliamente. Lo mejor es que SkinBoosters no aporta relleno, es simplemente ácido hialurónico para hidratar la piel desde el interior.

Se recomienda realizar dos tratamientos al año de Skinboosters a modo de mantenimiento, uno antes del verano y otro en otoño. En mi caso, repetiría sin lugar a dudas.

¿Qué te ha parecido este novedoso tratamiento? ¿Te animarías a probarlo?

Fotografías cortesía Clínica Londres y The Hot Mess Corner.